martes, 26 de enero de 2016

Muros de escollera, de gran utilidad para contención de tierras

Los muros de escollera son ideales para la sujeción de tierras en desniveles y taludes pronunciados, con gran capacidad de drenaje y sin impacto medioambiental



Los muros de escollera son la mejor opción para taludes vistos de pedraplenes de fuerte inclinación y muros de contención o sostenimiento. Los muros de escollera están formados por grandes bloques de roca (escollera) con forma prismática, de peso superior a 250 kg, y superficie rugosa. No requieren de ningún sistema de drenaje, debido a que este se produce de manera natural a través de los orificios dejados en la escollera.

Principales ventajas que ofrecen los muros de piedra de escollera

  • Facilidad de drenaje a través de los intersticios existentes entre los bloques de piedra.
  • Facilidad para adaptarse a movimientos del terreno, admitiendo ciertas distorsiones sin sufrir daños estructurales.
  • Facilidad de integración de la escollera en el entorno medioambiental, al tratarse de un material natural.



Al colocarlos, cada bloque de los muros de escollera va apoyado en su cara inferior en al menos dos bloques, manteniendo contacto con sus bloques laterales adyacentes, con el fin de asegurar así la mejor trabazón posible.






A medida que se vayan colocando las diferentes hiladas, se irá colocando la tierra natural del terreno en el trasdós, con lo que se consigue:

  • Reparto más uniforme de los empujes del terreno sobre la escollera.
  • Reducción de los empujes sobre el muro.
  • Garantizar el correcto drenaje del muro facilitado por los huecos en la escollera.
  • Evitar la salida de material arcilloso a través de la escollera y el aforamiento del agua en la superficie del paramento.
  • Plataforma de trabajo para posicionar la maquinaria en muros de mediana o gran altura.